El bumping es un método de robo que persigue la apertura de una puerta sin la llave del propietario y sin necesidad de forzar la cerradura de seguridad. A priori parece el método perfecto pero, ¿cómo se hace?
El método bumping consiste en introducir en el cilindro de la cerradura una llave manipulada y golpear la misma con el fin de hacer «bailar» los pistones del cilindro. Esto consigue que los pistones del cilindro salten simultáneamente cuando la llave es golpeada, permitiendo el giro de la llave y por tanto la apertura de la puerta de seguridad. La técnica de Bumping (también conocida como ramping) se ejecuta en apenas medio minuto y no daña el sistema de cierre de la puerta, por lo que es complicado de apreciar en un primer vistazo.

Son llaves preparadas o rectificadas exclusivamente para abrir puertas sin llave. Se introducen en el interior de la cerradura de seguridad para ser golpeadas y hacer saltar los pistones del cilindro.
Hoy en día, conseguir una llave bumping no es nada complicado, en Internet se pueden comprar fácilmente, además existen múltiples vídeos en youtube donde se explican los detalles de la técnica para abrir puertas de forma rápida.
El bumping como técnica de apertura de puertas tiene su origen en oficio del cerrajero que la usa para la apertura de la puerta de forma legal y a petición de sus legítimos propietarios.
Hoy se ha convertido una de las técnicas de robo más peligrosas para los propietarios y los sistemas de seguridad. Normalmente, los ladrones profesionales utilizan complejas herramientas para forzar cerraduras de seguridad y penetrar a través de los sistemas más avanzados.
Sin embargo, con el bumping ocurre otro fenómeno. La sencillez de este método provoca que multitud de usuarios prueben a abrir una puerta a través de este método.
Conocerla está al alcance de cualquiera. Existen innumerables videos explicando cómo se realiza y esta información en manos de delincuentes está haciendo mucho daño a los propietarios de viviendas. Aquí os dejamos un vídeo de Internet dónde explica cómo abrir una puerta mediante el método bumping.
El bumping como técnica de apertura de puertas tiene su origen en oficio del cerrajero que la usa para la apertura de la puerta de forma legal y a petición de sus legítimos propietarios.
Hoy se ha convertido una de las técnicas de robo más peligrosas para los propietarios y los sistemas de seguridad. Normalmente, los ladrones profesionales utilizan complejas herramientas para forzar cerraduras de seguridad y penetrar a través de los sistemas más avanzados.
Sin embargo, con el bumping ocurre otro fenómeno. La sencillez de este método provoca que multitud de usuarios prueben a abrir una puerta a través de este método.
Conocerla está al alcance de cualquiera. Existen innumerables videos explicando cómo se realiza y esta información en manos de delincuentes está haciendo mucho daño a los propietarios de viviendas. Aquí os dejamos un vídeo de Internet dónde explica cómo abrir una puerta mediante el método bumping.
Si el ladrón no tiene acceso al cilindro de la cerradura de nada sirve el bumping. La estrategia de blindar el cilindro mediante un escudo de seguridad es una de las mejores soluciones dado que no hay ninguna cerradura 100% segura.
Estos escudos son fáciles de instalar y compatibles con la mayoría de cerraduras. Para acceder al cilindro simplemente hay que girar 180º una llave magnética.
Para más información, consulta el interesante post sobre los escudos DISEC que publicamos hacer unas semanas.
Esta debería ser la primera medida de seguridad para evitar ataques mediante bumping mientras estamos en casa. Son de fácil instalación y ofrecen una seguridad excelente por muy poco dinero.
Puede parecer una tontería, pero realmente funciona. Los ladrones, a no ser que tengan un interés especial en entrar en una determinada vivienda, suelen elegir robar en la que tiene menos medidas de seguridad. Salvo en casos concreto, buscan el botín más fácil, de manera que estar más protegido que el vecino es una medida de seguridad a tener muy en cuenta.
El hecho de tener alarma o simplemente una pegatina que lo simule nos puede evitar la visita inesperado de algún amigo de lo ajeno.